Es por eso que creo que la relación entre el terapeuta y el cliente es primordial. Sé que asistir a las sesiones no es fácil. Y es por ese motivo que fomento una sesión libre de estrés, creando un ambiente de confianza, libre de juicios y confortable, donde tu te sentirás verdaderamente escuchado, esa será mi prioridad.
Utilizaremos diferentes recursos terapéuticos, con del fin de evolucionar en tu crecimiento personal . Esto lo lograremos aplicando fórmulas psicoterapéuticas y técnicas de relajación. Estrategias cognitivo-conductuales, tales como ejercicios de respiración, relajación muscular progresiva y trabajo personal, las utilizaremos para construir tu propia caja de herramientas, llena con recursos para su uso en situaciones de la vida real. Hablemos. Te sentirás mucho mejor.

“Todo el mundo necesita alguien con quien hablar”

Nuestra mirada profesional

Como profesional de psicoterapia corporal o somática combino el conocimiento de la psique humana con la capacidad de ver la individualidad de cada persona. Una mirada integradora, que conoce el funcionamiento del organismo, cuerpo y mente unificados y en interdependencia de funcionamiento, sin juicios ni valoraciones, que permite conectar con los recursos esenciales de cada persona.

Y a partir de aquí, poniendo atención en el aspecto saludable, sano y pleno de energía, nos acercamos a mirar el conflicto para transformarlo.

La voz, la mirada, la postura corporal, la respiración, la tensión muscular son valoradas durante el proceso terapéutico, aún si no es posible, o si no es el momento, de intervenir directamente sobre el cuerpo.

La psicoterapia corporal o somática no es una reunión de herramientas y técnicas para movilizar el cuerpo y las emociones, sino una manera de concebir y observar a la persona en todos los aspectos fundamentales que la conforman .